Guía básica para trabajadores frente al COVID.

Las empresas y empleadores pueden prevenir y desacelerar la propagación del COVID-19 en su lugar de trabajo. Los empleadores deben responder de manera que contemple el nivel de transmisión de la enfermedad en sus comunidades y modificar los planes de respuesta de sus empresas según sea necesario.

Lo recomendable es que las empresas y empleadores coordinen con funcionarios de salud  de sitio externo y locales de sitio externo para contar con información oportuna y precisa en la que basar las respuestas correspondientes. Las condiciones locales incidirán en las decisiones que tomen los funcionarios de salud pública en relación con las estrategias a nivel de las comunidades.

Como empleador, si sus operaciones comerciales se interrumpieron, reanudar las actividades normales o en fases es una oportunidad para actualizar sus planes de preparación, respuesta y control frente al COVID-19. Todos los empleadores deben implementar y actualizar, en la medida de lo necesario, un plan que:

  • Sea específico para su lugar de trabajo,
  • identifique todas las áreas y tareas con posible exposición al COVID-19 e
  • incluya medidas de control para eliminar o reducir dichas exposiciones.

Hable con sus empleados acerca de los cambios planificados y pídales que aporten su opinión. Además, trabaje junto a los empleados y sindicatos para comunicar de manera eficaz la información importante acerca del COVID-19.

Evalúe realizar chequeos de salud diarios, ya sea en persona o virtuales (como evaluar los síntomas y/o la temperatura) de los empleados antes de su ingreso al establecimiento, de conformidad con lo establecido por las autoridades de salud pública locales y estatales y, si están disponibles, sus servicios de salud ocupacional.

Los empleados que parezcan tener síntomas al llegar al trabajo o que se enferman durante el día deben ser apartados inmediatamente de otros empleados, clientes y visitantes, y se los debe enviar a casa.

Tome medidas si un empleado tiene infección por COVID-19 presunta o confirmada:

En la mayoría de los casos, no es necesario que cierre su establecimiento. Si pasaron menos de 7 días desde que el empleado enfermo estuvo en el establecimiento, cierre las áreas que dicha persona usó por períodos prolongados:

  • Espere 24 horas antes de limpiar y desinfectar para minimizar la posibilidad de que otros empleados se expongan a gotitas respiratorias. Si no pueden dejar pasar 24 horas, espere tanto como sea posible.
  • Durante este tiempo de espera, abra las puertas y ventanas exteriores para aumentar la circulación de aire en las áreas correspondientes.

¿Qué puedo hacer como empleado?

  • Limpie las superficies sucias con agua y jabón antes de desinfectarlas.
  • Use siempre guantes y batas adecuadas para los productos químicos que usará para limpiar y desinfectar.
  • Recomiende a los empleados que sigan cualquier política o procedimiento nuevo en relación con la enfermedad, las tareas de limpieza y desinfección y en reuniones y viajes de trabajo.

Se laven las manos con frecuencia con agua y jabón por al menos 20 segundos o usen desinfectante de manos con al menos un 60 % de alcohol si no hay agua y jabón disponibles. Informe a los empleados que si sus manos están visiblemente sucias deben usar agua y jabón y no desinfectante de manos. Los siguientes son algunos momentos clave en los que los empleados deben lavarse las manos:

  • Antes de comenzar y al finalizar los turnos de trabajo
  • Antes y después de los descansos en el trabajo
  • Después de sonarse la nariz, toser o estornudar
  • Después de ir al baño
  • Antes de comer o preparar comidas
  • Después de colocarse, tocar o quitarse la cubierta de tela para la cara
  • Eviten tocarse los ojos, la nariz y la boca sin haberse lavado las manos.
  • Se cubran la boca y la nariz con un pañuelo desechable al toser o estornudar, o que lo hagan sobre el pliegue del codo. Que boten los pañuelos usados en cestos de basura sin contacto y se laven las manos con agua y jabón por al menos 20 segundos inmediatamente. Que usen un desinfectante de manos que contenga al menos un 60 % de alcohol si no hay agua y jabón disponibles. 
  • Pongan en práctica tareas de rutina de limpieza y desinfección de objetos y superficies que se tocan con frecuencia, como puestos de trabajo, teclados, teléfonos, barandas y manijas de las puertas. Las superficies sucias se pueden limpiar con agua y jabón antes de desinfectarlas. 
  • Eviten usar los teléfonos, escritorios, oficinas y otras herramientas y equipos de trabajo de otros empleados, siempre que sea posible. Se deben limpiar y desinfectar antes y después de usarlos.
  • Pongan en práctica medidas de distanciamiento social evitando reuniones numerosas y manteniendo distancia (al menos 6 pies) de otras personas siempre que sea posible.

Cree políticas y prácticas de distanciamiento social. Modifique su espacio de trabajo para ayudar a los trabajadores y a los clientes a mantener el distanciamiento social y separe físicamente a los empleados entre ellos y de los clientes siempre que sea posible. Las siguientes son algunas estrategias que pueden adoptar las empresas:

  • Implemente espacios de trabajo flexible (por ejemplo, teletrabajo).
  • Implemente horarios de trabajo flexibles (por ejemplo, rotar o escalonar los turnos para limitar la cantidad de empleados que están en el lugar de trabajo al mismo tiempo).
  • Modifique el espacio de trabajo para aumentar el espacio físico entre sus empleados.
  • Aumente el espacio físico entre los empleados y los clientes (a través de servicios desde auto, barreras físicas como divisores).
  • Use carteles, marcas con cinta adhesiva y otras herramientas visuales como calcomanías o cinta de color en el piso colocada con una distancia de 6 pies, para indicar dónde colocarse cuando no hay barreras físicas disponibles.
  • Implemente opciones flexibles para reuniones y viajes (como posponer las reuniones o eventos no esenciales, de conformidad con las reglamentaciones y guías estatales y locales).
  • Cierre o limite el acceso a áreas de uso común donde es más probable que los empleados se reúnan e interactúen.
  • Prohíba el intercambio de apretones de manos.
  • Preste servicios en forma remota (por ejemplo, por teléfono, video o web).
  • Adapte sus prácticas comerciales para reducir el contacto cercano con los clientes, por ejemplo, a través de servicios desde el auto, compras en línea para recoger, compras telefónicas, servicio de entrega en la acera y opciones de entrega a domicilio, siempre que sea posible.
  • Aleje la terminal de pago electrónico/lector de tarjeta de crédito de la caja, si es posible, para aumentar la distancia entre el cliente y el cajero.
  • Modifique el momento de reposición y aprovisionamiento para que sea fuera del momento de mayor actividad o fuera de hora, si es posible, para reducir el contacto con los clientes.

Si tiene más de una sucursal, evalúe otorgar a los gerentes de cada una la autoridad para tomar las medidas que correspondan según sus planes de respuesta al COVID-19 con base en sus condiciones locales.

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