Si te gusta la naturaleza, en especial las plantas y quieres aprender más de ellas, esto es para ti
Hoy te hablaremos de un lugar muy especial que se encuentra en una de las Maravillas Naturales de México: el vivero de Xel-Há. ¿Qué lo hace tan especial? Hay varios factores, pero el principal es el amor y pasión con el que trabajan todos los colaboradores en él. Todo el esfuerzo que ponen para que las plantas crezcan fuertes y hermosas. El segundo factor, son los 3 tipos de palmas que alberga: palma chit, palma caribeña y palma nakax.
Estas tres variedades de palmas comparten una característica, se encuentran amenazadas debido a una mezcla de factores. Entre ellos se destacan su tala desmedida, la reducción de la selva conquistada por las ciudades y sus largos periodos de crecimiento.
El vivero de Xel-Há tiene la importante labor de conservar estas tres especies de palmeras, que después ocupan diferentes espacios verdes en los parques del Caribe Mexicano o son reintroducidas en su ecosistema natural como parte de los programas de reforestación. En él trabaja gente que es completamente apasionada por las plantas y dedican su vida a conocer de ellas y darles todo el cariño y cuidado que necesitan para crecer.
LAS TRES PALMERAS DEL VIVERO DE XEL-HÁ
Como mencionamos antes, hay tres especies principales que habitan el vivero, aquí te contamos un poquito más de cada una de ellas.
PALMA CHIT
La palma chit tiene mucha importancia en su ecosistema. Se convierte en proveedora de sombra para plantas que no crecen tan alto como ella y refugio para algunos animales. Su importancia también es crucial para los mayas, quienes son responsables de su nombre, “chit”. Ellos la utilizan para crear utensilios de su vida diaria y para construir los techos de sus casas.
Su tronco puede crecer hasta 7 metros de altura, mientras que sus hojas en forma de abanico se alargan hasta 1 metro de diámetro adicional (aproximadamente).
PALMA NAKAX
Se trata de una palmera pequeña y solitaria, con apenas 1 a 4 metros de altura, tronco pequeño de 5 centímetros de diámetro y entre 9 y 16 hojas. Se trata de una especie endémica de la Península de Yucatán. También toma su nombre del maya, sin embargo, no es tan popular su uso para el ser humano. Suele ser más decorativa.
PALMA CARIBEÑA (O PALMA REAL)
Esta palmera es originaria del Caribe y de la Península de Yucatán. Puede llegar a crecer hasta 30 metros de alto y contar con un tronco de 60 centímetros de diámetro con sus hojas en forma de penacho. Sus hojas son plumosas y tienen entre 4 y 8 metros de largo. En Cuba es considerado un árbol sagrado y sus semillas son utilizadas para crear alimento, medicinas y aceite.
EL SUSTENTO DE LA PLANTA: LA TIERRA
El paso número uno es la tierra. Tener una buena tierra, rica en nutrientes, es esencial para tener éxito en el vivero, ¿pero cómo sabemos que es una buena tierra?
Es recomendable nutrir la tierra con lo necesario para que las plantas crezcan fuertes. Tú también puedes hacer tu composta especial y así, reciclas y generas tu propio huerto.
EL PRIMER HOGAR: EL EMBOLSADO
Parte esencial del proceso de siembra es el embolsado de la tierra. Una vez que la tierra se mezcla con la composta se embolsa en diferentes tamaños. Depende de la especie de palmera que sea, el tamaño que se busca tener y el destino (parques, hoteles o selva).
El embolsado es fundamental, pues la tierra no debe estar tan compactada y debe tener un mínimo de centímetros para que las semillas puedan germinar.
DONDE COMIENZA TODO: LA RECOLECCIÓN
Haciendo un poco a un lado la tierra, está el proceso de recolección de semillas de las palmeras, que es bastante sencillo. Basta con identificar los racimos de semillas que tienen las palmeras e identificar el momento ideal para cortarlas. Los expertos en semillas, dicen que a simple vista puede identificar si ya están “buenas” o aún les falta madurar un poco más.
PREPARACIÓN DE LAS PALMERAS: LAVADO DE SEMILLAS
Otro paso importantísimo es el lavado de la semilla. Esta viene recubierta con lo que Manuela llama “pulpa”, que es la cáscara y más basurita que puede llegar a tener la semillita.
Este proceso comienza inmediatamente después de la recolección. Se dejan las nuevas semillas remojando en agua dulce por toda la noche. Esto con el objetivo de ablandar la pulpa y que el proceso de lavado sea mucho más sencillo.
Al día siguiente, ya con las semillas reblandecidas, deben ser lavadas en una coladera que le permite retirar toda la pulpa y quedarse con la semilla más pura, lista para ser sembrada.
UNAS VACACIONES AL SOL: EL SECADO
Después de que la semilla de las palmeras quede en su estado más puro, se deja secar al sol por un periodo de 24 horas. Una vez transcurrido este tiempo, están más que listas para ser sembradas.
LISTAS PARA CRECER HERMOSAS: LA SIEMBRA
¿Recuerdas las bolsitas con la tierra? Después de que están listas, son colocadas juntas en el área designada al tipo de planta que albergarán y ahora sí, viene el sembrado.
Con un palito de unos 2 centímetros de diámetro se hace un hoyo en la tierra de unos 5 centímetros de profundidad. Después, se deben poner entre 4 y 5 semillas en cada bolsita. Esto con el objetivo de que haya más posibilidades de que germine la palmera.
AHORA A ESPERAR…
El proceso más difícil es la paciencia. Pueden ser entre 5 y 8 meses para que las plantitas estén listas para ser trasladadas a su destino final. Hay otras que pueden tardar hasta 4 años en tener la suficiente fortaleza y tamaño para asegurar que crecerán en la naturaleza o en donde sea que vayan a vivir.
¿CÓMO TRASPLANTAR LAS PALMERAS?
Te daremos algunos consejos para trasplantar en tu casa. Aquí te dejamos algunos que te podrán ayudar para que tus plantas sean muy felices..
1.- PON ATENCIÓN A LA TIERRA
Asegúrate de comprar tierra rica en nutrientes. Puedes agregar algún sustrato o vitaminas para que tenga todo lo necesario para albergar a tus plantas. También puedes agregar tu preparación de composta.
2.- ELIGE BIEN: ¿MACETA O JARDÍN?
La selección del destino de tu planta es muy importante. Debes elegir una maceta amplia en donde las raíces puedan extenderse a sus anchas. Obviamente es mejor que esté en algún jardín. De ser así, también debes asegurarte de que el jardín tenga suficiente profundidad.
No es necesario que cortes la bolsa en la que está sembrada tu planta. Puedes ponerla directamente en la tierra o en la maceta. Sin embargo, también puedes “rescatar” la bolsa para reutilizarla la mayor cantidad de veces posibles y así ayudar a reducir nuestro consumo de plástico.
3.- ¿SOL, SOMBRA O MEDIA SOMBRA?
Existen plantas de sol y de media sombra. Asegúrate de que el lugar que tienes pensado para tu nueva hija, sea ideal para ella. Si es en interiores, asegúrate de que sean plantas de media sombra (no reciben luz de sol directa o la reciben por pocas horas del día, pero sí las alcanza a iluminar el sol). Si son de sol, asegúrate que reciban su luz directa por al menos 7 horas diarias.
4.- EL AGUA ES VIDA
El agua es fundamental para que tus plantas estén fuertes y sanas. Cuando siembres o compres alguna plantita, asegúrate de entender bien cuántas veces a la semana necesitas regarla y la técnica de riego. Hay algunas que necesitan abundante agua en la tierra, tallo y hojas. Hay otras que solo con que la tierra esté húmeda es suficiente. Investiga bien para que puedas darles una vida digna a las reinas de tu casa.
Como puedes ver, existen muchas formas para aprender más del cuidado de plantas de cualquier tipo. Te invitamos a que te animes a tener un par de palmeras en tu casa, ellas lograrán crear armonía y llenar de energía tu hogar.